viernes, 23 de abril de 2010

Perseguida

Soñé con una gorgona. No tenía serpientes sobre la cabeza y no había necesidad de evitar mirarla a los ojos. Estaba sentada en la sala de mi casa (que por supuesto no era mi casa) y el monstruo era una compañera que tuve en una clase de periodismo y que considero guapa. En el sueño, tenía la cara deforme: unas escamas extrañas le atravesaban el rostro. Llegó de visita con su mamá, para platicarle a mi familia que se iba a casar. No me acuerdo con quién.

Corte a:

Un aeropuerto que no conozco. Llego de un viaje que no recuerdo y, saliendo del avión, me está espera un corrector de estilo de la editorial para llevarme a mi casa. El tipo me da miedo y quiero salir huyendo.

Corte a:

Un borrego corriendo por el campo. Luego varias escenas sin sentido donde repito nombres como: Polideuco, Eurípides, Grayas, Jasón y tantos más.

Corte a:

Despierto y me siento como borracha.

Así las cosas cuando la mitología griega te consume el cerebro durante doce horas de un día de arduo trabajo.

3 comentarios:

  1. Que obtienes si combinas:

    "Furia de titanes" + Cena pesada + Dia de trabajo pesado

    = ¿Una cruda editorial mitologica?


    =)


    Saludos

    Oxscar

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  2. Heh, ya me había preguntado por cómo sería uno de esos desmanes de tu inconsciente y, como los de un servidor, hacen cortos sin sentido y te dejan en una desagradable 'cruda' como dice Oscar... Anyways, keep typin', mujer.

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  3. En efecto: esa noche todavía llegué a mi casa a ver 'la vieja' Furia de titanes.
    Y es cierto lo de la 'cruda'. Esa espantosa repetición de nombres griegos me dejó cansadísima...

    Saludos jeje

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